Bodegas Olcaviana, en La Roda (Albacete) es uno de los proyectos que la bodega valenciana Sierra Norte ha incorporado a su apuesta de expansión y diversificación de productores y elaboradores de vino, para aprovechar la sinergia exportadora de vinos de calidad españoles.
Recientemente en el concurso de vinos Cajamar Caja Rural en su undécima edición del Concurso de Vinos
2015, cuyo objetivo es dar impulso y apoyo a las bodegas de Valencia,
Albacete y Cuenca, elaboradoras de vino embotellado con certificación
de calidad reconocida: Denominación de Origen, Indicación Geográfica,
Vinos de la Tierra o Vinos de Pago, el vino 1564 Syrah Unico 2011, ha obtenido el premio ganador.
El vino ha sido elegido mediante cata ciega de los 43 vinos presentados por las 31 bodegas que han participado en el certamen. Todo un reto para los participantes y catadores, que no lo tuvieron fácil , pero que el Comité de Cata, dirigido por José Vicente Guillén Ruiz, doctor ingeniero agrónomo, y compuesto por un panel de expertos catadores de reconocido prestigio de las distintas zonas que han presentado vinos al concurso, eligieron este 1564 Syrah Unico 2011 como vino ganador.
Desde nuestro blog hemos recogido una impresión muy agradable de este vino, quizá también sea un vino que requiere bastante oxigenación o aireación para demostrar todo su potencial, pero aún así la complejidad que sus aromas en nariz desprenden, son agradables y muy elegantes.
Respecto al color, destacamos un cereza picota muy oscuro, ribete granate, limpio, brillante, muy graso, de hecho las lágrimas que deja en la copa, se deslizan muy lentamente, dando la sensación de un vino muy alcohólico, que tras la ingesta, apenas se nota dicha característica.
La nariz es compleja, con recuerdos a frutos muy maduros como los higos, arándanos rojos desecados y ciruelas en compota, aparecen notas de tinta china, notas minerales como la pizarra negra y las característica típica de los vinos de la variedad Syrah, la pimienta negra en grano.
En boca tiene una acidez marcada que lo hace fresco y agradable al paladar, el tanino es amable, apenas se nota pero es el justo y necesario para hacerte salivar. El postgusto es medio, pero alargado en ciertos aromas, así pues hay recuerdos a caramelos de cereza, de violetas y esa pimienta negra en grano, se nota mineralidad también.
En general destacamos que el vino tiene mucho potencial de evolución en lo próximos años, por lo que en períodos posteriores de entre 6 meses y un año seguirá demostrando que es un vino excelente e irá mostrando muchos más aromas y sabores, que seguro que no defraudan a los consumidores más exigentes.
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