Del del 30 de Octubre al 2 de Noviembre, el Ayuntamiento de Benlloch ha organizado la segunda edición del Benlloch International Wine Meeting, una revisión de la tradicional Festa de la Verema de Benlloch .
El BIWM contempla diversas actividades entre las cuales destacan
aquellas destinadas al sector profesional vitivinícola, que comprende el
sector comercial, el agrícola, el transformador, el turístisco, el de la
restauración y la hostelería y, también, el de la comunicación.
En el programa se han preparado diversas actividades como una exposición de vinos del sur de Francia, o una conferencia sobre las características comunes de los vinos del área mediterránea o diversas mesas redondas sobre la IGP Vins de Castelló o sobre enoturismo.
Aquí os dejo enlace al programa para que veáis en detalle las diversas actividades que se han realizado.
Aunque me hubiese encantado estar en todas las actividades, hoy 1 de noviembre he asistido a dos interesantes actividades como la Mesa redonda de Gestión Enoturística y la cata de vinos del sur de Francia (interesantísima), aparte de compartir mesa y mantel con organizadores y demás invitados.
Respecto a la Mesa redonda de Gestión Enoturística, donde han participado los representantes de las bodegas Mas de Rander, Barón de Alba, Bodega Flors y Magnanimus, moderada por el profesor de la UJI Artur Aparici, ha sido una puesta en común de actividades y propuestas para lanzar la Ruta del Vino de Castellón, que aunque ya es una realidad como asociación, necesita darse a conocer y proponer una serie de actividades en torno a este tipo de turismo. Por supuesto que la provincia de Castellón y el resto de provincias de la Comunidad Valenciana, deben ser los primeros en conocerla, ya que está cerca, aglutina una serie de pequeñas bodegas muy cercanas a núcleos turísticos y por supuesto se elaboran vinos de excelente calidad.
Se han comentado distintos puntos de vista, empezando por los que apuestan a fusionar la gastronomía con el enoturismo, la promoción en zonas turísticas costeras y sobre todo en la restauración local, donde el vino producido por la IGP "Vins de Castelló" es el gran desconocido en las cartas de vinos ofrecidas a los comensales. Desde luego que las redes sociales y los medios de comunicación deben hacer un eco importante de la zona, pero desde las bodegas han de programar e incluir diversas actividades que permitan la promoción y destaquen sobre otro tipo de ocio turístico de la zona.
Tras este intersante debate, con participación de bodegas y profesionales del sector, hemos pasado a catar vinos del Languedoc francés, en concreto de tres D.O. que comparten territorio, aunque no terruño. Así pues la cata comentada de vinos empezó con la presentación por Michel Poudou, enólogo y asesor de proyectos enológicos en nuestro país (Chozas Carrascal y Mas de Rander, entr otros) y dio la palabra al presidente de la AOC Picpoul de Pinet.
Los vinos de esta variedad local y autóctona de uva blanca Picpoul de Pinet, que fue denostada en favor de otras variedades "mejorantes" blancas, fue recuperada hace 20 años por bodegas privadas y cooperativas, y actualmente está altamente ligada a una imagen de vino fresco, mediterráneo compañero de mesa para productos del mar y cultivos de ostras y mejillones de la laguna de Thau, una laguna costera separada del golfo de León por una barrera de arena costera próxima a Pinet. Hemos catado 5 vinos blancos de diferentes bodegas, con el denominador común de ser muy aromáticos, con más o menos recuerdos cítricos y flores blancas (jazmín y azahar), con frescura y un punto salino.
Michel Poudou nos presentó un vino tinto de Minervois La Livinière (Chateau de Gourgazaud), en concreto un 'coupage' de Syrah y Monastrell, con un paso por barrica bastante ligero, donde la fruta negra y un ligero aroma a cacao le daban una personalidad al vino muy diferente, madurez y una boca redonda han conseguido un vino muy mediterráneo y fácil de beber.
Y casí sin tiempo para más, el vino dulce de Moscatel de grano menudo de la AOC Muscat St Jean de Minervois, un vino dulce con alcohol añadido para detener la fermentación de una uva sobremadurada que nos pareció fresco, recuerdos cítricos y flores blancas, ideal para aperitivos y postres.
No dio tiempo a más y despues compartimos mesa, mantel y una comida en un local de Benlloch, donde pudimos intercambiar impresiones de la mañana, y espero que en nuevas ediciones podamos disfrutar de tan interesantes actividades como la de esta mañana.
0 comentarios :
Publicar un comentario