miércoles, 20 de febrero de 2013

Rioja o Ribera...

Este pasado fin de semana fuí a visitar Madrid, una visita cultural expres que incluyó El Prado, El Palacio Real y los monumentos y plazas más emblemáticas de la capital del reino. Por supuesto hubo tiempo para disfrutar de unas buenas tapas y quizá de vinos, aunque esto último no me acabó de gustar.


Es posible que me tachen de 'chauvinista' si digo que no encontré vinos valencianos en las típicas tabernas de tapas madrileñas, pero tampoco encontré ninguna garnacha de Madrid, por ejemplo. En emblemáticos sitios como La Dolores, Revuelta, La Fábrica... solo me ofrecían Rioja o Ribera del Duero, hablando de tintos, mientras que los Rueda eran la única opción de blancos y alguna garnacha navarra donde tenían rosados (sólo en un lugar).


Pienso que para el chateo o el tapeo, las opciones son escasas, pero por qué no contar con algún vino más, como un bobal de Utiel-Requena, un blanco del Penedés, una garnacha del Campo de Borja, etc... También es cierto que no he hecho un estudio en profundidad de los vinos que ofrecen las tabernas madrileñas, pero seguro que el 90% sólo te dan esas dos opciones.


Tempranillo y más tempranillo (supongo) son las opciones a elegir, y yo me pregunto ¿sólo con el tempranillo riojano o de la Ribera se puede abastecer una ciudad como Madrid?. Supongo que no y es por ello por lo que escribo estas líneas, ya que al igual que Barça y Madrid, rojos y azules y otros ejemplos de dualismo en este país, si algo tenemos para presumir y engrandecernos, es que tenemos una variedad cultural y gastronómica que nos hace ser diferentes de otros países de nuestro entorno.


Así que la próxima vez que vaya a Madrid, me llevaré mis botellas de vino y degustaré las fabulosas tapas con vinos de otras regiones, a ver si así me saben mejor.

0 comentarios :