martes, 13 de diciembre de 2011

Castellón tierra de vinos ancestrales

La semana margarita de este cálido mes de diciembre, día festivo par día laborable impar durante toda la semana, me ha permitido desplazarme a varias latitudes de la Comunidad Valenciana, con el fin de visitar pueblos y ciudades que conocía muy poco o tenían algún evento de tipo gastronómico.


Este último evento me empujó hacia la provincia de Castellón, precisamente hacia la población de Vilafamés, atraído por una supuesta feria gastronómica, que resultó ser una manera de promocionar los restaurantes de la zona y tener una pequeña carpa con un par de carnicerías y hornos y una bodega de la zona.


Y digo bodega porque antaño Castellón y en concreto la zona del Pla de Vilafamés y Les Useres, tenían una de las producciones de uva más importantes de la provincia, cultivos que se fueron sustituyendo por otro tipo más dirigido a la alimentación, tras la guerra civil española, como trigo, olivos y almendros. También es cierto que tras la filoxera de finales del siglo XIX y principios del XX, las variedades desaparecieron y se plantaron otras de tipo híbrido, que no producían vinos de calidad.


Pero a partir de principios de los años 60 del siglo pasado, se replanta la zona con variedades como la Tempranillo, Monastrell, Bonicaire y Macabeo, pasando a producir uva de mejor calidad para bodegas pequeñas de la zona (vino para autoconsumo y pequeñas producciones) y cooperativas que unían los esfuerzos de los pequeños minifundios para hacer vino y vender la producción de otro tipo de cultivos.


Curiosamente el Vilafamés había una cooperativa que estuvo produciendo vino en solitario hasta principios del año 2000 en que, pequeños productores se establecieron para crear sus propias bodegas. La bodega que conocimos y visitamos en Vilafamés fue Mayo García, una pequeña bodega que elaboran vinos siguiendo un método tradicional transmitido de padres a hijos durante cuatro generaciones y que tenía presencia en esa mini feria gastronómica que fuímos a visitar.


Junto con un grupo de personas visitamos el pequeño almacén donde se ubican los depósitos y sala de crianza de la bodega, una bodega de poca producción con viñedo relativamente jóven y que elabora un blanco, un rosado y dos tintos con personalidad propia, fruto de un trabajado proyecto de Gabriel Mayo García, su propietario. Comentar que la marca comercial de sus vinos es Magnanimvs y podemos encontrar unos vinos de calidad y únicos en la zona usando variedades como la Cabernet Sauvignon, Merlot, Syrah, Chardonnay, Moscatel y Sauvignon Blanc.


Tras comer en la localidad y visitar su castillo en lo alto de la montaña divisando el valle y su Museo de Arte Contemporáneo, fuímos a pasear por el Pla de Les Useres, otra de las zonas vinícolas con más valor de la zona. Allí visitamos otra pequeña bodega de la que os contaré en otro post y que es muy interesante.


0 comentarios :