La bodega valenciana Pago de Tharsys ha instalado un corazón gigante de unos 2 metros de altura en sus instalaciones, en el que en las próximas semanas, las parejas de enamorados que visiten la bodega podrán colocar un candado y sellar su amor arrojando la llave al lago.
La acción comenzó hace unas semanas, cuando se hizo llegar a distintos restaurante de toda España unas cajitas regalo que acompañarán a la botella del cava de Pago de Tharsys en la cena de San Valentín. En su interior, pétalos de flores, un candado y una invitación para visitar la bodega. Además, una de cada dieciocho cajitas contiene como regalo una noche de hotel para dos personas, por lo que el brindis puede venir con premio redondo.
Al respecto, el responsable de Marketing, Alberto Martínez, señaló que “con esta iniciativa buscamos continuar con nuestra filosofía de ofrecer productos de calidad con un valor añadido. La saturación de marcas en el sector exige diferenciarse, y como el presupuesto de las bodegas como la nuestra es muy limitado, debemos utilizar el ingenio para conseguirlo”.
A pesar de ser una pequeña bodega familiar, Pago de Tharsys se consolida año tras año como una de las más relevantes de la Comunidad Valenciana, tanto en la elaboración de vinos y cavas de alta calidad como en la difusión de la cultura del vino.
No hay que olvidar que Pago de Tharsys es pionera en presentar iniciativas peculiares, tanto en productos con presentación singular, como la línea de cavas en los que las botellas llevan un colgante de cerámica inspirados en seres mitológicos, así como en la organización de eventos como la Fiesta de la Vendimia Nocturna, donde los invitados son protagonistas y se convierten en vendimiadores para recolectar las variedades Albariño y Godello a la luz de la luna.
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